Siguen las protestas: zafarrancho entre policías deja cinco lesionadas en Campeche

CAMPECHE | La crisis de policías que vive Campeche se agudizó ayer cuando elementos de seguridad que están en paro se enfrentaron a agentes ministeriales afines a la titular de la SPSC, Marcela Muñoz Martínez, de quien piden su destitución.

Tras no recibir su quincena, policías que se mantienen en paro en esta localidad, acudieron a la academia de Policía, pero al no recibir su pago bloquearon la entrada lo que derivó en un zafarrancho.

Los hechos ocurrieron poco después del mediodia, en las inmediaciones de la Academia Policiaca debido a que los agentes exigieron el pago de sus quincenas, pues han transcurrido cinco días sin haber recibido el pago de su salario.

El saldo del zafarrancho fue de cinco integrantes de la agrupación Mujeres Valientes lesionadas y se acusó al subsecretario de Asuntos Internos de la SPSC de Campeche, Víctor Hugo Sánchez, de ser uno de los agresores.

El incidente ocurrió cuando unos 100 elementos de Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana (SPSC) acudieron a la sede alterna de la institución en la capital campechana para exigir el pago retrasado de salarios, que según los quejosos suma más de dos meses.

Según los manifestantes, ya tenían un acuerdo para dialogar con autoridades, pero de improviso aparecieron 150 agentes leales a Muñoz Martínez para tratar de frenar la protesta y quitarles los autobuses donde se transportan los agentes inconformes, por lo que sobrevino el zafarrancho.

Víctor Contreras, director de Asuntos Internos de la SPSC y pareja actual de la titular Marcela Muñoz, golpeó al reportero Héctor Zavala, quien filmaba el zafarrancho y le rompió el teléfono celular.

Al sitio llegó el fiscal del Estado, Renato Sales Heredia, acompañado por unos 50 agentes ministeriales fuertemente armados, quienes intentaron decomisar los autobuses en que se movilizan los sublevados. Hubo fuertes discusiones y a punto estuvo de armarse un nuevo enfrentamiento.

El diputado federal Flores Pacheco y el fiscal Renato Sales discutieron en los accesos a la Academia de Policía para evitar que las agresiones continúen. Según Sales, acudió a las instalaciones para gestionar que se pague el sueldo de los 65 policías sancionados.

No hubo respuesta a las exigencias del pago a los policías rebeldes, por lo que se retiraron a la sede oficial de la SPSC a fin de atender a los elementos que recibieron algunos golpes. Cinco “mujeres valientes” fueron trasladadas a la clínica del IMSS y los otros afectados por crisis nerviosa y problemas de presión arterial fueron atendidos en las instalaciones de esa Secretaría.