Quintana Roo acumula 1,263 personas desaparecidas; FGE maquilla cifras, acusa colectivo
31 Ago. 2024 10:22 am
REPORTE MAYA
REDACCIÓN
CANCÚN | 31/08/24 | México vive una crisis de desaparecidos pues las cifras oficiales reportan más de 115 mil personas no localizadas desde que hay registro y más de 50 mil cuerpos sin identificar en el sistema forense, de esta cifra, mil 213 corresponden a Quintana Roo hasta el 16 de mayo de este año, según datos de la “Red Lupa”; sin embargo datos difundidos por colectivos de ‘Madres Buscadoras’ aseguran que la Fiscalía General del Estado (FGE), manipula las cifras ya que tan solo en agosto van 50 desapariciones que en la mayoría tratan de ocultar.
Quintana Roo no es ajeno al panorama nacional, en México, la cifra exacta de personas desaparecidas sigue siendo incierta, pero las estadísticas disponibles muestran una crisis creciente que se repite en la entidad.
Según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO), desde 1952 y hasta el 22 de julio de 2024, había registrado 324,464 desapariciones en todo el territorio nacional.
De ellas, 115,894 eran personas que seguían sin ser localizadas, mientras que 192,451 habían sido encontradas con vida y 16,119 sin vida, según el texto “A Quienes Nos Faltan: Datos Para Encontrarles”, de Data Cívica.
Las cifras de la ONG detallan que la tendencia de desapariciones ha aumentado en las últimas dos décadas. En 2006, se registraron 612 desapariciones en todo el país; mientras que, en 2023, la cifra escaló a más de 29,668, un incremento de 49 veces en los casos documentados. Data Cívica subraya que el impacto de las desapariciones varía significativamente según la región, sus datos indican que Tamaulipas fue la principal, donde, por cada 100,000 habitantes, 560 personas fueron registradas como desaparecidas; detrás estuvieron Colima, Sinaloa, Aguascalientes, y Zacatecas como las entidades con las tasas más altas de personas desaparecidas entre 2006 y 2024.
Explican que mientras que el 78.3% de las mujeres desaparecidas son eventualmente localizadas con vida, menos de la mitad de los hombres desaparecidos tienen la misma suerte. Por otro lado, los hombres adultos (de 20 a 59 años) son los que más siguen sin ser localizados y quienes tienen más probabilidades de ser encontrados sin vida.
En este contexto, integrantes del colectivo “Verdad, Memoria y Justicia” acusaron a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo de ocultar las cifras reales de personas desaparecidas en la entidad, justo en el Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada.
Este viernes 30, en protesta, pegaron fotografías de los desaparecidos en diversas partes del estado, señalando que las autoridades no solo han fallado en sus labores de búsqueda, sino que también manipulan las estadísticas para no afectar la imagen turística de la región, asegurando que la cifra oficial de 673 reportes de desapariciones no refleja el número real de personas aún no localizadas.
Datos de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) registran 3,448 personas desaparecidas en Quintana Roo de 2006 a la fecha, destacando los municipios de Benito Juárez, (Cancún), Othón P. Blanco y Solidaridad como las demarcaciones donde más denuncias de personas de documentan; y según estos datos, mil 264 permanecen en calidad de desaparecidas, pues 2 mil 184 ya fueron localizadas, algunas de ellas sin vida, y la mayoría con vida con el 97 por ciento de los casos.
Hay que subrayar que la mayoría de las personas que desaparecieron en Quintana Roo, el 51.3 por ciento son hombres y el 48.6 por ciento son mujeres. Aunque la CNB comenzó a contabilizar a las personas desaparecidas desde 2006, fue a partir de 2019 cuando la cifra comenzó a dispararse en el Estado.
La numéralia descendió en 2020, en la etapa de pandemia del Covid-19, volvió subir en 2022 con el pico más alto de 306 hombres y 202 mujeres desaparecidas ese año; la tendencia continúa escalando hasta la primera mitad de 2024 con 222 hombres y 119 mujeres desaparecidas.
Datos difundidos en distinto medios locales consigna que al 25 de agosto se habían reportado 50 personas desaparecidas, destacando las ciudades de Cancún y Chetumal, y picos en ascenso en Playa del Carmen y Puerto Morelos, según los registros en fichas de búsqueda de la FGE.
La dependencia estatal publicó en sus redes sociales 54 alertas durante este mes, de las que 12 fueron en Cancún, mismo número en Chetumal, 11 en Playa del Carmen, siete en Puerto Morelos, seis en Felipe Carrillo Puerto, cuatro en Bacalar y dos en Tulum; de las mismas se asienta que de los desparecidos en agosto, cuatro son mujeres y 50 hombres, en edades de 15 a 29 años.
Estas desapariciones se suman a las que reportó Red Lupa en su corte del 16 de mayo, cuando dio a conocer que mil 213 personas estaban extraviadas, principalmente en las ciudades antes mencionadas. En ese informe se reveló que 494 eran de Benito Juárez, 281 de Othón P. Blanco, 176 de Solidaridad, 30 de Felipe Carrillo Puerto y 23 de Isla Mujeres, en este último en su mayoría en la zona continental.
Red Lupa indica que Quintana Roo tiene una calificación de Nivel medio superior de gravedad en materia de desapariciones de personas en un estado donde según el último Censo de Población y Vivienda de 2020, Quintana Roo tiene una población de 1, 857 985 habitantes, de los cuales la mayor parte se concentra en la ciudad de Cancún, donde se presentan el mayor número de desapariciones.
El organismo documenta que al corte del 16 de mayo de 2024, Quintana Roo tenía mil 213 desaparecidos, de las cuales 833 son hombres (68.67%) y 378 mujeres (31.16%); Un dato grave es que en este año, 272 personas desaparecidas tenían menos de 18 años, siendo la mayoría niñas, exactamente el 66.18% (180 casos).
Red Lupa indica que 46% de los casos de personas desaparecidas y no localizadas está en el rango de edad entre los 15 y 29 años, además que hay 37 casos sin edad de referencia. El 30% de los casos de mujeres desaparecidas y no localizadas está en el rango de edad entre los 15 y 19 años, el incremento ha duplicado los registros del 2022.
Los datos de la ONG asegura que Benito Juárez concentra la mayor cantidad de casos de personas desaparecidas, para mayo de 2024 acumulaba 494 casos. En los demás municipios los casos aumentaron; en Isla Mujeres y Felipe Carrillo Puerto pasó de cifras de un dígito a más de 20 y 30 personas.
En relación al análisis territorial, las personas que forman parte de la Red indican que en el estado existen ciertos aspectos que merecen señalarse: “últimamente han aumentado los casos en la zona sur del estado. Hay una mayor visibilización de esta problemática y ahora las familias ya no están solas, antes no hablaban ni denunciaban”.
Agregan que: “Quintana Roo es un estado de paso migratorio, con mucha población extranjera, flotante, que deja una importante derrama económica”.
Además de que “existen varios grupos delictivos que financian sus organización a través de la trata de personas, el tráfico de drogas y armas y principalmente las extorsiones a los empresarios pero también a los trabajadores, incluso a las personas que trabajan en la construcción de hoteles”.
“Antes los casos de larga data no tenían voz, no había ficha de búsqueda, ahora sí se hace esto y puede que por eso aumente el número”, aseguran y rematan: “Quintana Roo también es un foco rojo en violencia feminicida”.
Un dato es certero: las desapariciones de personas en Quintana Roo van en aumento, por ello, el próximo 20 de septiembre, se llevará a cabo una jornada de toma de muestras de ADN dirigida a los familiares de personas desaparecidas, anunció este día, Romana Rivera Ramírez, presidenta del Colectivo Verdad, Memoria y Justicia, evento que se realiza en coordinación con la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas, encabezada por Teresa Guadalupe Reyes.
Esta jornada representa un logro significativo en la lucha de los colectivos de búsqueda en el estado, quienes han trabajado incansablemente para construir un banco de datos genéticos que permita facilitar la identificación de las víctimas de desapariciones forzadas. Por primera vez en la historia de Quintana Roo, se recolectarán muestras de sangre de los familiares, considerados víctimas indirectas, para crear un perfil genético que ayude en las labores de búsqueda y localización.
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